Aumentar la capacidad de Auto Observarnos es lo que nos permite evolucionar y salir de los condicionamientos de nuestra personalidad.

 

La idea es ser capaces de observar con neutralidad nuestro comportamiento, nuestro cuerpo o sensaciones corporales, así como lo que ocurre en la experiencia de interactuar con otras personas.

 

Podemos observar nuestro diálogo interno, lo que elegimos decir a otras personas (y lo que elegimos callar), cómo se lo decimos y para qué. También podemos observar nuestras creencias o interpretaciones, que son la base (muchas veces oculta) de todo lo anterior.

 

Muchas de las respuestas que damos están programadas, nuestras creencias se toman como si fueran “una verdad”, lo que juzgamos habla más de nosotros que de lo que ocurre afuera. Todo eso está en transparencia: no se ve. 

 

Por ejemplo: pensemos en una persona que sistemáticamente se queja y no es consciente de que se está quejando. Quizás en algunos momentos puede decir que no tolera la queja o que no le agradan las personas que se quejan, o no hablar nada de la queja. El no ser consciente de que se queja no tiene acceso a otras posibles variantes de conducta y no puede elaborar aprendizajes de su responsabilidad personal, quedando atrapada en la queja.

 

Cada persona se encuentra en negación e inconsciencia de muchos de sus automatismos, por eso es que los discursos no revelan nada valioso hasta que no ocurra un darte cuenta de algo que antes no habías visto. La auto observación nos permite comenzar a ver lo que está en transparencia y al poder ponerle luz y conciencia, recién allí podremos a partir de la aceptación, transformarlo e integrarlo.

 

Lo que son nuestros mayores obstáculos, se convertirán en nuestro mayor PODER.

 

“¿Cómo puedo ir más profundo en la auto observación?”

 

“Nuestra mente suele interpretar la realidad desde la polaridad. Lo que tomamos como idea de la realidad, se trata de la interpretación que hacemos de los hechos.

Solemos tener una fuerte dificultad para ver los hechos como son ya que los vemos desde nuestro punto de vista, desde nuestras creencias y juicios. Lo que interpretamos está distorsionado por nuestras preferencias, lo que nos gusta y lo que nos desagrada. Nuestros miedos y deseos contaminan la interpretación y quedamos atrapados en el autoengaño.

Esto se explica en los 3 puntos del eneagrama que se encuentran en el triángulo central:

  • Punto 9: Inconsciencia y dificultad para auto observarnos.
  • Punto 6: Miedo y temores que surgen de la incertidumbre de confrontarnos con lo inesperado.
  • Punto 3: Descubrir nuestro autoengaño, la identificación con un falso ser. Reconocer la dificultad para observarnos con honestidad.

De modo que para DESPERTAR y vernos con mayor objetividad es necesario soltar nuestra mente, prepararnos emocionalmente para poder salir del auto engaño.

Observarnos con neutralidad implica salir de la visión polarizada, no importa si pensamos que lo que estamos observando es “bueno” o “malo”.

Suelo decirte que te auto observes cómo lo hace un científico al realizar una investigación.

El científico busca observar objetivamente para ir confirmando o refutando sus hipótesis. En cuanto el científico pierde objetividad puede querer confirmar sus ideas, dejando de lado datos observables. Sería algo así como “no me gusta esto, prefiero ignorarlo y centrarme en otra cosa”. Esa actitud arruinaría su investigación. Puede que el científico en el proceso encuentre información que no confirme su teoría, pero es necesario entrenar la habilidad de continuar observando objetiva y neutralmente.

Solemos observarnos condicionados por nuestras creencias, juicios y deseos inconscientes. Esto nos lleva a interpretar lo que vemos en lugar de observarlo con neutralidad.

Para este proceso que estamos compartiendo te invito a observarte disociándote, mirándote “desde afuera”; recordando la importancia de aspirar a la neutralidad.

Hay una frase que dice:

“Se requiere de verdadero coraje para ver quién eres en realidad y verdadero compromiso personal para dejar de sentir pena por no ser lo que “desearías ser”…”

Vamos adelante… aún hay mucho más por des-cubrir.

Repite la frase: ¿Qué más puedo ver que aún no estoy viendo?